Restaurante Área de Boceguillas (Segovia)

Bueno, pues la visita a este restaurante data de un muy frio lunes 21 de Diciembre de 2009. Volviendo 3 amigos desde Madrid a Cantabria paramos a comer con la idea de un buen lechazo en mente. Vimos este área de servicio y nos decidimos a entrar ya que tenia buena pinta y la tripa pedía combustible. Pedimos mesa y rápidamente nos acomodaron en un enorme comedor acristalado de forma circular. En cuanto a que debíamos pedir no hubo ninguna duda, ya que la carta nos ofrecía un apetecible "Menú en Ruta" que consistía en lo siguiente: entrante de consomé, primer plato de morcilla, chorizo y pimientos, segundo a elegir entre lechazo asado al horno de leña, cochifrito y chuletillas de lechazo a la parrilla y postre a elegir. Dicho y hecho, 3 de esos maaaaarchando!.

También he de destacar que cometimos el "pecado" de regar la comida con agüita. Lo cierto es que el fin de semana fue duro y no estaba el cuerpo para muchas alegrías, además del consabido riesgo que supone beber y conducir (ya lo decia Stevie Wonder).

Antes de servirnos el menú propiamente dicho nos obsequiaron con un caldito y unos encurtidos de aceituna y ajo que a mi en concreto me encantan.

Por fin llego el momento y nos trajeron el consomé. Como ya he comentado anteriormente hacia un frio que pelaba y el consomé calentito entraba genial. Estaba correcto y con buen sabor.

Lo siguiente seria la morcilla y chorizo con pimientos de piquillo. Plato bien presentado y nada grasiento. Se notaba que habían retirado el exceso de aceite de la fritura lo que dejaba la morcilla con un punto crujiente muy bueno. El chorizo y los pimientos eran de buena calidad por lo que no se podía fallar en este plato tan simple pero a la vez tan rico.

El segundo plato, como todo el mundo verá, fue lo realmente interesante de la comida. El menú ofrecía 3 tipos de carne y daba la casualidad que eramos 3 comensales. No pudimos dejar pasar la oportunidad de probar cada una de las preparaciones. De modo que las compartimos en el centro.


El lechazo asado estaba tierno y jugoso y fue el favorito de mis compañeros. El cochifrito tenia el punto de fritura muy bien conseguido y se dejaba comer muy gustosamente. Las chuletillas, que fueron mis favoritas, tenían ese toque de parrilla que le daban un sabor excelente. No tenían mucha "chicha" pero ya os digo que estaban muy sabrosas. Cada plato tenia su correspondiente acompañamiento de patatas hechas de 3 formas diferentes y además nos sirvieron una simple ensalada de cebolla y lechuga bien aliñada por nuestra parte.

Una vez terminado el festival de carne pedimos la carta de postres. Los había variados y con buena pinta a simple lectura. Yo me decanté por una teja con helado de mandarina y mis compañeros por una tarta de frutas creo recordar, aunque no estoy del todo seguro. En concreto mi postre estaba delicioso y muy refrescante. Me gusto mucho. Del otro postre no puedo decir gran cosa pero no me pareció que dieran saltos de alegría. Lo dejaremos en correcto.

La comida tocaba a su fin tras no pedir cafés pero nos ofrecieron un chupito de una especie de aguardiente u orujo casero acompañado de ricas rosquillitas de anís. Nos trajeron la botella para degustarlo a gusto del cliente y por lo que me dijeron estaba bastante bueno.

Llego la hora de pagar y la cuenta ascendió a 81 euros entre los 3. Nada caro la verdad. En resumen, buena comida tradicional bien presentada, un trato y atención excelente, ambiente tranquilo y un precio bien asequible. No se puede pedir mucho más para disfrutar de una comida.

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