La Conrada (Puente La Reina)

Hemos pasado este fin de semana en un maravilloso pueblo de la Ribera Navarra, llamado Lerín, embotando pimientos del piquillo, una joya culinaria por cierto, que aunque tarde, están muy buenos. De vuelta a Pamplona el domingo decidimos comer por el camino porque las ganas de cocinar eran escasas. Asi que paramos en Puente La Reina, un pueblo con mucho encanto, y conocido por ser el punto donde se encuentran el Camino de Santiago Francés y el Aragonés.

Y en la calle por donde pasaba la antigua carretera de Estella a Pamplona, hay un restaurante de carta llamado La Conrada. Por lo visto es muy habitual que te toque esperar un poco para comer, pero nosotros hemos tenido suerte y hemos entrado directamente al comedor. Un comedor con unas 15 mesas cuadradas para 4 personas, bastante acogedor y con buen servicio.


Teníamos para elegir el menú de fin de semana de 18 euros, con 4 platos de primero y 5 de segundo, bastante completo. Pero nosotros hemos preferimos la carta.

Fuera de carta nos han ofrecido cardo a la Navarra (con jamon frito y en una salsa hecha con su propio caldo y engodada con harina) que es uno de los platos que hemos elegido ya que acaba de empezar la temporada y te aseguras la calidad. Además en este caso estaba muy bien limpio, asi que estaba muy fino y sabroso.




El otro plato de verdura han sido alcachofas. Las alcachofas tienen dos temporadas, una antes de Navidades, que son alcachofas más pequeñas y más "preticas" y la otra temporada es en marzo que son las más comunes y las que conoce todo el mundo. En este caso el plato traía 6 alcachofas partidas a la mitad, con jamón serrano frito, ajo y aceite de oliva crudo. Al ser más pequeñas la cantidad se ha quedado algo escasa, y una de las alcachofas no estaba muy limpia, pero de sabor estaban exquisitas.



Por último una ensalada con queso de cabra y dulce de tomate. El medallón de queso estaba caramelizado y era muy grande. El dulce de tomate le daba un sabor muy epecial a la ensalada, quiza un poco empalagoso en grandes cantidades.



De segundo hemos elegido otros 3 platos. Rapito al horno sobre cama de patatas panadera. La verdad es que estaba impresionante, una ración muy maja, el pescado muy bien hecho, jugoso y en su punto.



Anchoas fritas. En este caso el pescado estaba algo seco y quiza demasiado salado. De todos modos no es muy buena idea pedir anchoas en domingo y en "tierra dentro".



Solomillo de ternera con salsa dulce. El solomillo estaba en su punto, y la salsa dulce hecha de higos y pasas en una consistencia caramelizada. Le acompañaba muy bien a la carne. Además traía una ración de patatas fritas.



Por último hemos probado dos postres. Tarta de cuajada. Venía acompañada de chocolate negro fundido por encima y una base muy fina de bizcocho. Muy buena.



Mousse de natilla. Venía acompañada de nata montada y una bola de helado de galleta María. La Mousse insípida, es más, no hemos sido capaces de encontrar el sabor de la natilla. Lo curioso del postre ha sido el helado de galleta María, impresionante y encima la bola estaba recubierta de chocolate blanco fundido frío y crujiente. Para hacer un postre sólo de este helado. Me ha encantado.


Como uno de nosotros tenía que conducir hemos elegido una botella de vino de 375ml de Las Campanas. Un crianza navarro del 2006 hecho de tempranillo y cabernet souvignon. No nos ha gustado, muy afrutado, es más, el olor tenía cierto toque a moscatel. Comentar que ha sobrado vino entre 3 personas.



Además una botella de 1,5l de agua con gas y una cesta de pan, por cierto muy bueno. La cuenta ha sido 81.8 euros con i.v.a. incluido. Desde mi punto de vista recomendable. Además entre semana el menú es de 1o euros.