martes, 9 de agosto de 2011

Restaurante La Marquesina (Corralejo)



Estuvimos cenando en un concurrido restaurante del puerto de Corralejo, en cuya entrada se puede ver una buena representación de los pescados y mariscos de la zona para que se te vaya haciendo la boca agua justo antes de comer.


Pedimos un par de raciones y un pescado a la sal. Al igual que en todos los restaurantes de Fuerteventura, lo primero que dejan en la mesa junto con el pan son unas salsas para la comida, normalmente mojo picón, mojo verde y una especie de ali olí muy suave.


Comenzamos con un pulpo a la brasa, típico de la zona, venían servidos dos tentáculos bien hechos y que el camarero parte en rodajas delante de ti, y le aliña con un poco de aceite y de vinagre balsámico de Módena. Para mi gusto demasiado aliñado, pero con todo el sabor fuerte del mejor pulpo.


Pedimos también una ensalada tibia de chipirones y cebolla frita, traía bastante chipirón, un poco de lechuga y tomates cherry. Muy rica, aunque diría que la ensalada debería haber estado aderezada, ya que si aliñas por encima bañas de demasiado aceite los chipirones.


Como pescado a la sal elegimos una recomendacion: el bocinegro, un pescado típico de la zona y parecido al besugo. Para sacarlo de la costra de sal, lo rocían con anís y le prenden fuego, lo que lo hace muy espectacular.


El pescado estaba bastante bueno, aunque para nuestro gusto demasiado hecho, por lo que quedó algo seco y no en el punto justo de preparación, una vez le limpiaban la sal de fuera, lo presentaban como no podía ser de otra manera con unas papas arrugas.


Al estar tan seco el pescado tiramos mas de lo que nos gustaría de la segunda tanda de salsas, mucho más finas y diluidas que la primera, aunque todas de gran sabor.


Todo esto lo comimos con una botella de albariño, Gran Bazan, una marca que nos gusta mucho y que fresco entra muy bien con el tipo de cena que hicimos.

La cuenta salió a 40 euros por cabeza, que viendo los precios habituales de la zona y lo que comimos, sin postre a mi se me hizo algo caro, creo que hay mejores opciones en Corralejo.

La dirección es el C/Muelle Chico sin numero. Básicamente dad un paseo por el puerto y lo encontrareis sin perdida.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Mesón El Segoviano (Castro-Urdiales)

El Mesón Segoviano es conocido por tener una de las mejores ofertas de marisco y pescado que hay en Castro-Urdiales. Evidentemente su especialidad son los clásicos asados castellanos pero también tiene muy buen producto del mar. Tiene fama de ser un poco elevado el precio de la materia, pero era la única manera de saciar el capricho de marisco en un día especial como es el lunes.

Está situado en la plaza del Ayuntamiento, debajo de los arquillos y muy cerca del conocido Mesón Marinero.


Comimos al aire libre. No es una terraza, es parte de la calle, pero al estar debajo de los arcos está bastante recogido. Nos trajeron la carta pero tampoco la estudiamos a fondo porque teníamos claro cuál era nuestro objetivo, la parrillada de marisco. Nos comentaron que también había parrillada mixta, en la que servían marisco y pescado, pero a expensas de quitar los grandes crustáceos del mar, asi que nos decantamos por la primera.



Como se aprecia en las fotos, el plato en si consistía en:

-1 bogavante: estaba impresionante, a la parrilla. Con diferencia el bicho que más me gustó.

-1 langosta: muy buena, a diferencia del bogavante tenía la carne más dura y algo menos sabrosa, pero en cualquier caso muy buena.

-2 cigalas: de buen tamaño, sabrosas y muy bien hechas, todos los crustáceos tenían el punto de sal exacto.

-2 nécoras: fue lo último que comimos, y con el poco hueco que teníamos no se si las disfrutamos como debíamos. Estaban bien llenas y con muy buen punto.

-langostinos a la plancha: más de lo mismo, muy bien hechos, con el punto de sal exacto y muy sabrosos.

-gamas cocidas: en el ranking las pondría en último lugar, pero no porque no estaban buenas, sino porque lo demás estaba impresionante.

-almejas:las almejas tenían un aliño por encima con ajo y guindilla roja que estaba exquisito.


Para llevar la contraria al dicho diremos que a pesar de no ser un mes con "r" el marisco estaba bien bueno. Ja,ja,ja.

Acompañamos la comida de un Albariño, Pazo Barrantes, muy fresquito y una combinación perfecta.


De postre elejimos una tarta de queso casero. El mesón tiene también mucha fama por los postres caseros que hacen. La presentación nos pareció un tanto hortera, pero la tarta estaba muy buena.


Por último nos invitaron a un par de chupitos de orujo de hierbas. Es un detalle que no todos los restaurantes tienen y la verdad es que se agradece.


Acabamos la comida muy satisfechos, nunca imaginé que el marisco podía llenar tanto. El precio nos pareció quiza un poco elevado. La parrillada ascendía a 165 euros que nos pareció acorde, pero como siempre nos olvidamos de sumarle el IVA, que es lo que nos descolocó. De todos modos la atención del camarero fue buena y la comida exquisita. Recomendable para un capricho.