miércoles, 21 de julio de 2010

Restaurante Japones Donzoko (Madrid)

El otro día cuatro amigos quedamos para ir a un restaurante japones que nos habían recomendado por su buena relación calidad-precio, así que allí nos dirigimos para comprobarlo personalmente.

La decoración del sitio es austera, muy alejada de la imagen actual de la mayoría de los japoneses, pero no por ello dejaba de ser un local agradable. El local es amplio y con varios salones individuales mas adentro, por lo que el tamaño que a primera vista podría ser pequeño, engaña mucho.

La carta de este sitio es muy amplia, con una sección enorme de sushi, sashimi, makis y uramakis. También destacan lo que serian menús en otros restaurantes japoneses, que en este restaurante lo llaman platos combinados, pero que harían las veces de menú ya que suelen ser una especie de combinacion de varios platos.

Para comer elegimos la opción de unos makis compartidos y un plato por cada uno de nosotros, ya que las preferencias de cada uno eran un poco diferentes. Al final nos decidimos por unos makis de langostino, la verdad estaban ricos y la ración era generosa, pero bien es cierto que mucho langostino no llevaban.


Uno de los comensales, eligió un plato de sushi especial, que tenia una pinta estupenda y por lo que comento la calidad y frescura del pescado era muy buenas, como se puede apreciar en la foto la pinta era estupenda.


Otra de las personas que fue a cenar, eligió un plato de sushi de salmón y atún que también tenia muy buena pinta y del que dio buena cuenta.



Los otros dos, nos decidimos a probar los menús que tiene este restaurante, ya que tenían una pinta muy sugerente y dos hombretones del norte necesitábamos comer bien para poder dormir a gusto.

Uno eligió un menú Makanouchi "Matsu" con cambio por sushi, que consistía en tempura, sashimi, verduras cocidas, salmón a la parrilla y sushi, todo ello presentado en una caja y acompañado de un cuenco de sopa de miso y un cuenco con arroz blanco. Lo cierto es que por cantidad y presentación el plato podría ser toda la comida en si misma, además es una forma de comer un poco variado sin tener que recurrir a pedir bastantes platos diferentes.



Yo por contra elegí un Yakiniku-tei que eran unas lonchas de ternera con salsa especial venia presentada en una plancha hirviendo, la guarnición consistía en sopa de miso, arroz blanco y unas verduras aliñadas que estaban francamente buenas.


La carne estaba muy rica y con la salsa quedaba muy bien, un plato sin mucho artificio pero muy sabroso y la combinacion con el arroz y las verduras estaba muy rica.

La sopa de miso que nos sirvieron estaba francamente buena y a los dos que la comimos nos encanto, ya que además es un plato perfecto para entonar el estomago antes de cenar.

Como ya estábamos un poco llenos de postre elegimos compartir un par de postres entre los cuatro, en esto nos decantamos por un helado de judía roja y una mousse de te verde. La verdad es que tanto el helado como la mousse estaba muy ricos y fueron un buen final para una agradable velada.

El precio final de todo fue de 35 euros por cabeza cenando todos con cerveza japones.



martes, 20 de julio de 2010

Restaurante ITXAS-BERRI (Getxo)

El otro día salimos a comer a la costa Vizcaína a un restaurante que nos habían recomendado por la calidad de su pescado y su ubicación en el puerto viejo de Algorta.

El puerto viejo de Algorta es una zona muy bonita con unas escaleras largas, plagadas de bares, donde en cada parada ir pudiendo tomarse un pintxo y una caña o un Txacoli.

El restaurante para personas que rehuyan del ejercicio físico de subir las escaleras y tomar cañas se encuentra justo abajo.

Fuimos dos personas a comer a dicho restaurante, después de revisar la carta que no era demasiado extensa ya que como hemos dicho la clave del sitio estaba en el pescado fresco que servían, nos decantamos por un par de entrantes a compartir y un buen pescado a la plancha.

Comenzamos con unos langostinos plancha, nos habíamos decantado por unas gambas plancha, pero como fuimos a comer a las 4 de la tarde (casi una comida-merienda) no quedaban y elegimos los langostinos, que tenían un tamaño hermoso y estaban muy sabrosos.


Después elegimos unas almejas a la marinera, que fueron servidas en una vasija de barro que nos trajeron hirviendo para que estuviesen en su punto mientras terminábamos de comer los langostinos. Las almejas tenían un buen tamaño y estaban muy sabrosas, el único fallo que podría ver es el orden de servir primero los langostinos y después las almejas, ya que al estar los langostinos con bastante sal por la plancha, hacían que las almejas parecieran un poco sosas.


Cuando estábamos casi decididos con el pescado a comer, íbamos a pedir dorada a la plancha, en la mesa de al lado sirvieron un pescado que no sabíamos cual era y que tenia una pinta estupenda. Finalmente nos decantamos por ese pescado que resultó ser mojarra, que según nos comento lo habían pescado el día anterior. He de reconocer que estaba super rico y se notaba muy fresco, lo sirvieron con un poco de ajo y una guindilla sin mucho artificio pero no necesitaba mas, solo la calidad de la materia prima era suficiente.

Para beber elegimos un clásico como es el blanco de rueda de Marques de Riscal, nos los sirvieron a su temperatura bien fresco y con una cubitera con agua y hielos para que no se quedase caliente durante la comida.


De postre pedimos finalmente un helado a medias para compartir ya que habíamos quedado bastante llenos con todo lo anterior.


Comentar finalmente que el trato fue siempre muy agradable y atento, y la comida nos salio por 35 euros por persona, un precio asequible para poder comer un poco de pescado fresco, un sitio muy recomendable.